Es bien sabido que las personas
pueden ser más felices cuando son agradecidas con la vida y hoy que retomo el blog, agradezco que estés acá leyendo, Agradezco
tener vida y poder estar escribiendo en este blog después de 5 años que inició,
hoy refirmo que este blog continuará, que hablaremos de diferentes temas, cada
dos meses y si antes alguien solicita un
tema en particular podríamos tocarlo, continuando con los agradecimientos hoy les comparto que uno de mis motivos más constantes de gratitud
son las duras pruebas de la vida, así como suena parece descabellado, pero para
que no suene como una gran locura deberé
explicar un poco de lo que me ha pasado
en estos años en donde me he alejado del
blog, pero que afortunadamente a pesar de mí falta de perseverancia, se fortalecieron
amistades y se hizo una red de apoyo.
En este blog se ha vertido un
cúmulo de bellos consejos, así como gritos desesperado de ayuda, se han visto
bellos casos de crecimiento, tanto físico como emocional en diversas personas,
algunas no escriben directamente o por correo explican que han recibido consuelo
por lo que acá se ha escrito, se han dejado de sentir solas, han encontrado sabios consejos y bellas amistades.
Para explicar mi agradecimiento
ante las adversidades debes saber que siempre
me consideré una mujer afortunada, hasta
que un ruptura sentimental me hizo revalorar aspectos de mi vida que ahora me
doy cuenta que me hacían daño, mis problemas estuvieron presentes en todo
momento pero por miedo a enfrentarlos los ignoré, como el dolor por la muerte de mi padre, el maltrato sistemático
de mi madre hacia mí, el cual ignoré pero nunca dejó de dañarme, así como aceptar atropellos por muchas
personas, entonces ha sido un duro golpe de pronto darme cuenta
que todo eso estaba ahí, ante la ruptura estuve algunos meses en gran
depresión, luego estuve otros enojada e irritable, vi en mí a una mujer que no
conocía, irritable, agresiva, fuerte y obstinada, recuerdo que llegué a pensar
que siempre sería esa mujer explosiva que no se podía controlar, como si mi
otro ser alegre, callado, tierno y sumiso
hubiera desaparecido.
Y así como llegó un día
simplemente ese odio se terminó, un día simplemente se fue, habían pasado
varios días en un estado de felicidad y paz, sentí de pronto miedo al pensar
que en cualquier momento podría regresar la otra mujer, pero de inmediato me he
dado cuenta que esas dos no son diferentes, son las mismas y viven en mí, esas
soy yo, hoy feliz pero capaz de
enfrentar duras pruebas. Así como mis genes me permiten compartir lo mejor de
dos mundo entre los hombres y las mujeres, ahora mi personalidad tiene más
diversidad y permito salir en el momento
adecuado a cada una de esas, mis “yoes” que
viven en mí, la feliz y la fuerte que en conjunto me dan gran armonía.
Lo bueno y lo malo conforman esta
que soy, me han ayudado a llegar a este
momento en donde te escribo a ti que has pasado vivencias similares a las mías,
si no estamos atentas claro que a veces la vida parece complicada, nosotras
somos las que decidimos considerar a los eventos como positivos y negativos,
derrotarnos o triunfar ante ellos; pero en todos casos tenemos la obligación para
nosotras mismas de levantarnos y agradecer pues son oportunidades para crecer y
seguir aprendiendo.
Ante el dolor y la angustia es
complicado o a veces imposible ver la lección que la vida tiene para nosotras.
Al fallecer mi padre de manera súbita, me volví más sensible al dolor de otros, al terminar ola relación con mi pareja, me permitió aprender
que el apego ha sido causa de los perores dolores en mi corazón. Cuando acepté
que la vida es cambio, total; cayó de golpe la idea que un día tendrás que dejar todo en esta vida, tanto
lo bueno como lo malo que nunca has querido soltar, entonces porque no hacerlo
día a día y disfrutar más la vida, ahora veo que el soltar es tan sano y
liberador. Hoy dejo que la vida siga su flujo, que la gente
llegue y se vaya de mi vida, me quedo con lo bueno y con agradecimiento a todo
lo bueno compartido, trato de aprender de lo “malo”, para ser cada día una mejor versión de mí.
Hoy agradezco ser especial, tener este Síndrome,
gracias al Síndrome de Insensibilidad
Androgénica he conocido mujeres valientes que a pesar de su propio dolor se han
levantado victoriosas, madres amorosas que apoyan a pesar de sus propios miedos
a su hijas para explicarles que unos genes no definen lo que eres, con este grupo he sentido en carne propia la
fuerza de un TE COMPRENDO, acepto la
diversidad sexual pues yo misma soy parte de esa diversidad, puedo compartir
experiencias de vida con mujeres de diversas partes del mundo y puedo decirme
amiga de mujeres que nunca he visto, me he dado cuenta que las personas que me
aman no se fijan en los genes, no les es relevante en su amor hacia mí y más
que eso me he dado cuenta que para amar necesito amarme a mí, y si el SIA es mío entonces soy yo y lo debo amar como
parte de mí, si no lo hago sería no amarme correctamente y no podré amar
correctamente. GRACIAS al SIA soy esta mujer,
que en este día se siente feliz y dichosa.
Espero que tú compartas experiencias
de aprendizaje, que busques en tu pasado, en tu presente todo aquello
maravilloso que has aprendido y que seguro tienes que agradecer, por ser una
mujer especial. Sigue escribiendo tus experiencias que nos enriquecen el alma. No dejes de compartirnos tus ideas en este blog.